6 aspectos de la educación alternativa que benefician a niños con altas capacidades y que podemos usar en casa o en el aula.

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Tener un peque con altas capacidades en tu casa o en tu aula, a priori puede parecer algo positivo. Se supone que le han evaluado profesionales que dicen que su inteligencia está por encima de la media y tiene potencialidades para disfrutar de un futuro lleno de éxitos profesionales.

Pero nada más lejos de la realidad. Antes de un diagnóstico de altas capacidades suele haber etiquetas previas como "déficit de atención", "fracaso escolar", "es vago", "no atiende", "es violento", "siempre está metido en conflictos", "es distraído"...cuando en realidad lo que le pasa es que SE ABURRE.

"detrás de un niño con fracaso escolar, déficit de atención o vago puede haber un niño con altas capacidades".

 

Y lo peor de todo esto, es que en muchas ocasiones el proceso de diagnóstico de altas capacidades no se llega a culminar y la criatura se queda con esas etiquetas, cuando lo que le ocurre, repetimos, es que se aburre. 

A las personas adultas nos suele costar mucho aún ver que nos equivocamos. Es normal, hemos sido criados en casa y educados en los colegios con la idea de que el error es algo negativo, nos menosprecia, cuando lo que hace es mostrarnos una oportunidad de aprendizaje y nos recuerda que somos humanos. Eso significa que tanto padres, madres, educadores y educadoras...nos equivocamos. Es así, si lo intentamos ocultar no avanzaremos. 

"si hay conductas negativas en un niño, puede que nos estemos equivocando en su acompañamiento"

Si observamos conductas negativas en una criatura puede ser que le pase algo internamente pero también puede ser que estemos haciendo algo mal. Puede que nuestra forma de acompañarla no esté siendo la adecuada por algún motivo o puede que algo del ambiente que le rodea no esté siendo adecuado (y es algo que podemos modificar nosotros). 

Darnos cuenta de que algo falla es el punto de partida para cambiar ese algo. Hay muchas maneras de realizar esos cambios y es el momento de investigar opciones, decidir cuáles pueden ser las más adecuadas y probar. Porque al final, por muy profesionales que seamos y por mucha experiencia que tengamos...las criaturas siempre nos sorprenden.

"la solución puede estar en la educación alternativa"

La educación alternativa nos ofrece muchas herramientas y recursos que pueden beneficiar enormemente a niños y niñas con altas capacidades, que necesitan nuevos retos, que tienen otros intereses distintos al resto del grupo, que en casa pueden satisfacer ese apetito interno si son acompañados por su familia. 

"si tienes un peque con altas capacidades, dale autonomía, enriquece su entorno material y social, ofrécele experiencias de ocio nutritivas".

A continuación presentamos algunas cuestiones presentes en metodologías activas que pueden servir para cambiar la vida a una criatura con altas capacidades:

1. Distintos ritmos de aprendizaje. En una escuela con educación alternativa se parte de que cada uno de los alumnos y alumnas tienen distinto ritmo de aprendizaje. Para detectar el ritmo de cada uno, la observación de la criatura con un ambiente preparado es la mayor herramienta que tenemos los acompañantes adultos. La individualización está omnipresente. 

2. Utilización de materiales manipulativos. En las escuelas que practican metodologías alternativas, como por ejemplo el método Montessori, siempre hay materiales que pueden manipular con sus manos e integrar a través de sus cinco sentidos. Eso genera experiencias más vivenciales y abre la puerta a su utilización de otras maneras, a la creatividad, lo que resulta sin duda muy beneficioso en criaturas con altas capacidades.

3. Grupo heterogéneo. Un peque con altas capacidades podrá nutrirse de otros peques que tienen distintos ritmos de aprendizaje: podrá ayudar a otros, ser ayudado por otros, compartir intereses...más allá de si tienen edades comunes o no. 

4. Autonomía. La autonomía de la que gozan las criaturas en una escuela con educación alternativa beneficiará a criaturas con altas capacidades. Que tenga posibilidad de trabajar en lo que desee y como desee, siempre y cuando respete los materiales y a los demás asistentes, le dará libertad. Si tienes un peque con altas capacidades, dale posibilidad de decidir sobre su actividad, que tenga opciones, que no se sienta encorsetado en lo que crees que debería hacer con su edad. Porque su maduración cognitiva puede no estar respondiendo a la media establecida para su edad.

5. Necesidades e intereses. Es importante practicar una observación y escucha activas para poder detectar los intereses y necesidades que pueda estar teniendo una criatura con altas capacidades. Si vemos, por ejemplo, que juega mucho con los coches quizás le interese saber más sobre ellos, sobre su funcionamiento por dentro y seguramente le resulte más atractivo hallar el número de ruedas que hay cuando junta 6 coches que multiplicar 6x4 en un papel sin más. 

6. Acompañamiento emocional. Las emociones que viven los niños y niñas en una sociedad como la nuestra son a veces muy intensas, pero las que vive un peque con altas capacidades pueden serlo aún más. Ser etiquetado, quizás apartado, sentirse rechazado... todo eso tiene que acompañarse de manera lo más respetuosa posible por parte de su familia y profesorado. Más allá de ser un niño o niña con altas capacidades es una criatura que necesita jugar, tener sentimiento de pertenencia a un grupo, disfrutar de la vida. Se le debe permitir expresar sus sentimientos sin ser juzgado y ofrecerle herramientas de gestión emocional.

Una criatura con altas capacidades necesita un entorno de comprensión que le permita desarrollarse como persona, dar rienda suelta a su ser, poder evolucionar en sus capacidades, sentir que es escuchado y tenido en cuenta. Al fin y al cabo, es algo que necesitan todas las criaturas, cada una con sus características particulares.